En Canción Nueva tenemos una forma concreta de presentar a la misericordia a las personas. Cuando hablamos de la Divina Misericordia pensamos en el Padre de las Misericordias, porque no hay forma de pensar en el Hijo y no en el Padre.
Este nombre nació cuando san Juan Pablo II decretó la Fiesta de la Misericordia y Canción Nueva, que siempre sigue a la Iglesia, llevó a cabo esta fiesta. En ese momento nuestro fundador estaba en un retiro, pero él la estaba siguiendo por la televisión y vio que el predio de Canción Nueva estaba lleno de personas y, en ese momento, percibió que había algo nuevo para los miembros de la Comunidad, entonces se retiró para escuchar a Dios, y el Señor le dijo: “Canción Nueva es casa de la misericordia”. Pero, ¿por qué este nombre? Porque este es el propósito de Canción Nueva, preparar hombres y mujeres nuevos para la segunda venida de Jesús.
Nosotros estamos destinados al cielo, somos ciudadanos del cielo y Dios siempre se manifiesta así en Canción Nueva: primero se vive y después se escribe. Nuestro fundador dijo además: “Somos una comunidad de amor y adoración, vivimos y experimentamos la misericordia de Dios, el rostro de la misericordia viene del perdón y la reconciliación”.
Nuestra historia es una historia de misericordia
Muchas veces estamos triste, sufriendo, teniendo muchas dificultades… pero si el propio Hijo de Dios sufrió tanto por nosotros, porqué nosotros no lo haríamos. Si yo vivo mi sufrimiento sin el auxilio de Dios no sirve de nada, pero en Dios todo tiene sentido.
Ante el sufrimiento somos invitados a realizar ofrecimientos, porque en la vida. Puede que tu salvación dependa de ese sufrimiento, por eso necesitamos tener un corazón abierto. Sin sufrimiento no hay conversión, no hay perdón, no hay cambio. Dios nos llama a vivir estas dos cosas: conversión y perdón.
Siempre recuerdo un dibujo donde Jesús toca a la puerta y no tiene picaporte por fuera, porque nosotros somos quienes debemos abrir la puerta para que el Señor entre.
Jesús Misericordiosos tiene actitudes del Padre de las Misericordias, es por eso que el Mons. Jonas Abib hizo un santuario donde se ve al Padre acogiendo al Hijo Pródigo, así mismo Dios quiere acogerte hoy.
Hoy es un día muy importante porque el Padre de las Misericordias quiere alcanzar tu corazón, independientemente de los que estás sufriendo, de la enfermedad, porque Él no solo quiere tus debilidades, te quiere completamente. El Padre solo quiere que vivas la reconciliación con Él.
Jesús nos invita a hacer algo nuevo, a vivir su misericordia y a vivir esa misericordia con las personas que están a nuestro alrededor, incluso con aquellas que nos cuestan. Quizás estés enojado por alguna enfermedad y estás sufriendo y piensas que Dios no te ama y no te escucha, pero hoy es el día para experimentar Su amor y misericordia. La misericordia ocurre cuando dejamos a Dios ser nuestro Señor.
¿Rezas para que alguien se convierta? Entonces tienes un gran motivo para entregar tu sufrimiento. “Dios te ofrezco este sufrimiento por esta situación”. ¡Dios hace cosas mucho mayores de lo pensamos!
Es necesario abrir la puerta de tu corazón, para que Dios lo pueda cambiar. ¡Hay un Padre que te está esperando con los brazos abiertos y con una fiesta! ¡Y la fiesta es porque tú regresas a Él!
Dios conoce todo lo que vives, todo lo que ocurrió en tu vida, pero quiere que creas que Él puede realizar su obra en esa situación.
Hoy Dios te invita a perdonar a las personas que te han lastimado y, el Padre del Cielo, este papá que siempre estuvo presente en tu vida, viene a regalarte Su abrazo y te pone en Su regazo para ayudarte a alcanzar la reconciliación y el perdón.
¡El Padre de las Misericordias te estás esperando para que comience la fiesta!
Padre Thiago Pereira
Comunidad Canción Nueva, actualmente se encuentra en el Frente de Misión de Paraguay.
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